Capítulo 446: Cubo

Su Jiyai miró a Leticia durante unos segundos.

Finalmente entendió todo.

Leticia no era solo una chica asustada que huía de su hogar. Ella era inteligente. Cuidadosa. Y tal vez... solo un poco desesperada.

Pero Su Jiyai no estaba enfadada.

Soltó un suave suspiro y se recostó contra el árbol de nuevo. Su voz era suave pero clara.

—No necesitas regresar —dijo Su Jiyai.

La cabeza de Leticia se levantó de repente. Sus ojos se abrieron ampliamente.

—¿Lo... dices en serio? —susurró.

Su Jiyai asintió.

—Lo digo en serio. No tienes que volver a ese lugar. No si no quieres.

Leticia la miró, inmóvil.

Luego, de repente, sus labios comenzaron a temblar nuevamente y estalló en llanto.

Pero esta vez, no era un llanto cuidadoso. Era desordenado. Ruidoso. El tipo de llanto en que tus hombros tiemblan y no puedes respirar bien.

Su Jiyai esperó, dejándola llorar.

Porque sabía que este era el verdadero.

El que Leticia había estado reteniendo durante demasiado tiempo.