579. Atractivo

Mauve abrió los ojos y lo primero que notó fue que no tenía rastro de dolor de cabeza. Se incorporó de inmediato y la fuerza al levantarse no le hizo dar vueltas la cabeza.

Mauve sonrió, tocándose la cara, y se dio cuenta de que su temperatura había vuelto a la normalidad. Se tocó la cara un poco más solo para estar segura.

—Alguien se despertó bastante activa —escuchó la voz de Jael y se giró para ver que estaba sentado en la esquina de la habitación mirándola.

—Jael —exclamó y trató de salir de la cama.

Él extendió su mano —Detente —dijo mientras se levantaba y empezaba a caminar lentamente hacia ella.

Se detuvo junto a ella y ella se movió un poco al lado, haciendo suficiente espacio para que él pudiera sentarse junto a ella.

—¿Cómo te sientes? —preguntó él.

—De maravilla —respondió ella con una sonrisa y estiró la mano—. Fue rápido, no pensé que me sentiría tan bien después de una siesta.

—Eso es bueno —él respondió mientras sus ojos se posaban en el parche de su brazo.