CAPÍTULO 46

P.O.V DE AMELIA

Había temido mi encuentro con Kaden en la casa de la manada porque no estaba segura de cómo actuar alrededor de él. Las cosas habían cambiado ahora y él no era solo mi Alfa, sino también mi pareja. Me preguntaba si eso cambiaría algo o si las cosas permanecerían igual, y tampoco sabía cómo iba a poder sentarme frente a él durante una hora mientras sentía el vínculo de pareja intensificarse entre nosotros.

Al salir de la escuela, Clara se ofreció a llevarme en coche, pero la rechacé. Era algo que necesitaba hacer por mí misma para poder valorar mis pros y contras sola, así como prepararme para la inevitable oleada de emociones que surgiría al verlo. Aunque, cuando llegué a la oficina de la manada, comencé a desear haberle pedido a Clara que viniera conmigo porque había una sensación roedora en el centro de mi pecho.