135 — ¡Humano insensato!

La tensión en la tienda era palpable mientras todos intercambiaban miradas silenciosas.

La voz de Valen atravesó el silencio, resonando con ira.

—¿Encontrar a la reina? ¿Por qué? —gritó, golpeando su puño contra la mesa de madera en el centro. Sus nudillos se tornaron rojos por el golpe, temblando con una mezcla de rabia e incredulidad.

Cynthia se situó frente a él, las manos entrelazadas detrás de su espalda. Su comportamiento sereno parecía irritarlo aún más.

—Ella es la que desbloqueó el portal —dijo ella con calma, su voz sin traicionar ninguna emoción.

La cabeza de Valen se levantó de golpe, su expresión torciéndose con desafío.

—¡Madre jamás haría eso! ¡No tienes pruebas! —exclamó.

Lucian, que estaba de pie a un lado, habló antes de que Cynthia pudiera responder.

—Doy fe de que ella no miente —dijo él con firmeza, su mirada fija en la de Valen.

Dylan, que se había estado recostando en uno de los postes de la tienda, enderezó su postura.