-Capítulo 285-

—Solo quiero hacer una propuesta —dijo Matilda con una mueca.

—Eso hizo sonar las alarmas en la cabeza de Lake —¿Qué propuesta? —preguntó con cuidado.

—Si convenientemente olvidas los eventos de anoche, cancelaré el dinero que me debes.

—Los labios de Lake se torcieron hacia abajo, en ese momento, se sintió exactamente como su padre.

—Y había pasado toda su vida tratando de escapar de eso que casi le hizo decir la cosa equivocada.

—Su primer instinto fue tratar de pagar, pero ¿qué le había hecho eso?

—Había pasado toda su vida tratando de pagar deudas que no había contraído, y no estaba más feliz por ello.

—Pero aparte de su complejo con el dinero, Matilda era una serpiente.

—Aceptar esto sería en su propio detrimento, solo si él cumpliera su parte del acuerdo.

—¿Podría quedarse con los cien mil y aún así contarle a Davian sobre lo que pasó en el momento adecuado? Era como ganar dos veces.