Un Paso Atrás, Un Paso Adelante

[EVE]

Después de otro día de descanso, finalmente regresé a la escuela.

No podía decir que extrañé mucho los días que pasé enferma, pero una cosa se quedó conmigo: la presencia de Cole, revoloteando a mi alrededor pero sin cruzar esa línea invisible.

Fiel a su palabra, mantuvo su distancia, lo suficientemente cerca para estar ahí si lo necesitaba pero lo suficientemente lejos para que pudiera respirar sin sentirme sofocada.

Al principio fue extraño, casi inquietante saber que siempre estaba a la vuelta de la esquina, listo para ayudar con una sola llamada.

Por una vez, no estaba insistiendo con su persistencia habitual, ni intentando cerrar la brecha entre nosotros con los planes exagerados de su hermana.

Simplemente estaba allí, respetando el espacio que había prometido dar. Y aunque no estaba segura de cómo me sentía al respecto—si aliviada o decepcionada—me encontré acogiendo la libertad, la oportunidad de moverme sin el peso de su presencia constante.