Kai Solis sintió la tensión en el aire. La presencia del guerrero de armadura oscura no era como la de los asesinos que había enfrentado antes. Había algo en él, una energía antigua que se filtraba en la atmósfera como un veneno invisible.
El filo negro de la guadaña destelló bajo la luz de la luna, absorbiendo la claridad y dejando tras de sí un rastro de sombra. Kai apretó los dientes. Sabía que esta batalla sería diferente.
"Tienes la mirada de alguien que ya ha probado el verdadero dolor," dijo el guerrero de armadura oscura. Su voz era grave, con un eco perturbador. "Eso me complace. No hay nada más aburrido que cortar a un hombre que no sabe lo que es perderlo todo."
Kai no respondió. En su interior, su Conciencia de Flujo Total comenzó a activarse de nuevo. Su mente se volvió clara, su respiración se acompasó con el viento. Esta sería una batalla a muerte.
El guerrero desapareció de su vista en un parpadeo.
El instinto de Kai rugió. Se giró apenas a tiempo para esquivar el corte descendente de la guadaña, que desgarró el suelo como si fuera papel. Un torrente de energía oscura explotó en todas direcciones, levantando una nube de polvo y escombros.
Kai saltó hacia atrás, pero el guerrero ya estaba sobre él. El filo de la guadaña silbó en el aire una vez más. Kai giró su espada en un movimiento preciso, bloqueando el golpe con un destello de chispas. El impacto envió una vibración que recorrió su brazo.
"Nada mal," dijo el guerrero, empujándolo hacia atrás con una fuerza brutal. "Pero sigues siendo débil."
Kai frunció el ceño. Sabía que no podía permitirse pelear con la misma estrategia de siempre. Este enemigo era diferente. Más rápido. Más fuerte.
Respiró hondo, y en su interior, sintió la energía fluir con una intensidad renovada. El entrenamiento había dado frutos. No era el mismo que hace unos días. Su Conciencia de Flujo Total se expandió.
El guerrero se lanzó de nuevo, la guadaña descendiendo en un golpe mortal. Pero esta vez, Kai lo vio venir con claridad absoluta. Sus pies se movieron con fluidez, esquivando el ataque por un pelo. Luego, con un giro veloz, su espada se alzó en un tajo horizontal.
El filo cortó el aire.
El guerrero apenas logró esquivarlo, pero la punta de la hoja rasgó un trozo de su capa negra.
Hubo un instante de silencio.
Luego, el guerrero soltó una carcajada grave. "Interesante. Estás evolucionando en medio del combate. Esto podría ser más divertido de lo que pensé."
Kai no perdió el tiempo. Se lanzó al ataque, su espada danzando en un torbellino de cortes y estocadas. El guerrero esquivaba y contraatacaba con su guadaña, el filo negro dejando rastros de sombra en cada movimiento.
El duelo se intensificó.
Chispas volaban en el aire cada vez que las armas chocaban. La velocidad de ambos aumentó. Kai podía sentir su cuerpo adaptándose, su Conciencia de Flujo Total refinándose con cada segundo.
Pero su enemigo también comenzó a cambiar.
La energía oscura alrededor del guerrero se volvió más densa, más opresiva. Kai sintió un escalofrío recorrer su espalda. Algo estaba sucediendo.
"Veamos qué tan lejos puedes llegar, Kai Solis," murmuró el guerrero. Luego, su voz se volvió un rugido. "Despierta, Cazador de Almas."
La guadaña se cubrió de llamas negras. Kai sintió una presión abrumadora caer sobre él.
Sabía que esto era solo el comienzo.
El combate entre Kai y el guerrero de armadura oscura continuó, llevándolos al límite. La Conciencia de Flujo Total de Kai se expandió a un nivel que nunca antes había experimentado. Cada uno de sus movimientos se volvió más preciso, más letal. Sin embargo, su enemigo también reveló nuevas habilidades, demostrando ser un rival digno.
Con cada choque de sus armas, la tierra temblaba.
Kai podía sentir que se estaba acercando a un nuevo umbral de poder. Pero también sabía que, para vencer a este enemigo, tendría que cruzar la línea entre lo humano y lo divino.
El destino de su batalla estaba por decidirse.