El Umbral del Poder

Kai Solis respiraba hondo, sintiendo el ardor en sus músculos. La guadaña envuelta en llamas negras del Cazador de Almas emanaba una energía abrumadora, una presencia que amenazaba con devorar todo a su paso. Sin embargo, Kai no podía retroceder. No después de haber llegado tan lejos.

El guerrero de armadura oscura giró su guadaña, dejando un rastro de fuego en el aire. "Puedo ver el cambio en ti. Pero ¿será suficiente?"

Kai no respondió. Su Conciencia de Flujo Total había alcanzado un punto en el que cada movimiento del enemigo parecía ralentizarse en su mente. No obstante, la presión que emanaba el Cazador de Almas se intensificaba, como si la propia muerte se cerniera sobre él.

El enemigo se movió con una velocidad imposible. Kai sintió el aire cortarse cuando la guadaña descendía sobre él. Esquivó por un margen mínimo, el filo rozando su mejilla y dejando una línea carmesí. Pero no podía permitirse distraerse. Respondío con un contraataque veloz, su espada cortando en diagonal.

El impacto resonó como un trueno.

El Cazador de Almas detuvo la estocada con el mango de su guadaña, sus ojos brillando con una mezcla de sorpresa y deleite. "Interesante. Pero aún no es suficiente."

Kai sintió su corazón latir con fuerza. Sabía que estaba en el umbral de algo nuevo. Su poder había crecido, pero aún no había cruzado la línea que lo llevaría al siguiente nivel. Cerró los ojos por una fracción de segundo, concentrándose. Y entonces, la voz dentro de él habló nuevamente.

"Estás al borde del despertar. Atraviesa el umbral o muere."

El guerrero de armadura oscura sonrió, como si sintiera el cambio en el aire. "Veamos hasta dónde puedes llegar, Kai Solis."

Las llamas negras de la guadaña se extendieron, cubriendo el suelo y envolviendo todo en una cortina de oscuridad ardiente. Kai sintió la energía abrasadora devorar el aire a su alrededor. Pero en lugar de retroceder, avanzó.

Su espada brilló con una intensidad nueva, una luz que contrastaba con la sombra opresiva del enemigo. Su Conciencia de Flujo Total se expandió más allá de lo que jamás había experimentado, su percepción alcanzando una claridad absoluta.

Y entonces, el choque final comenzó.

Kai se movió con una velocidad superior a la de cualquier humano ordinario. Su espada cortaba a través de la oscuridad, dispersando las llamas negras por breves instantes antes de que volvieran a juntarse como una marea infernal. Cada golpe que daba era recibido con un contraataque brutal de la guadaña, las ondas de choque sacudiendo el campo de batalla y abriendo grietas en el suelo.

La voz dentro de él volvió a resonar: "Rompe tus límites. No eres solo carne y hueso, eres algo más."

El guerrero de armadura oscura pareció percibir el cambio. "¿Qué es esto? ¿Un nuevo poder?"

Kai sintió una energía diferente fluyendo en su cuerpo. La luz que emanaba de él se volvió más densa, como si estuviera comenzando a desbordarse. Su Conciencia de Flujo Total había alcanzado una nueva dimensión.

El Cazador de Almas rugió, atacando con una fuerza abrumadora. Kai bloqueó con su espada, pero esta vez no solo resistió el impacto: lo devolvió. Una onda de choque surgida de su hoja hizo tambalear al enemigo por primera vez.

El guerrero soltó una carcajada. "Interesante. Pero yo también tengo un as bajo la manga."

La oscuridad en torno a él comenzó a concentrarse, formando un torbellino de sombras que se fundió con su cuerpo. Su armadura se tornó más densa, y sus ojos resplandecieron con un fuego de otro mundo. "Bienvenido a mi verdadera forma."

Kai apretó los dientes. Sabía que la batalla no había terminado. Sabía que debía ir más allá de lo que jamás había imaginado.

La voz dentro de él pronunció las últimas palabras antes del desenlace: "Es hora de trascender."