Capítulo 137

Kimberly se quedó helada ante la pregunta de Elena, su mente acelerada. La nitidez en la voz de Elena era diferente a todo lo que había escuchado de ella antes.

Los ojos de Elena la atravesaban, implacables. —Kimberly, respóndeme. ¿Por qué no me dijiste sobre la oferta de Mona?

Kimberly abrió la boca para hablar, pero no salieron palabras. Su corazón latía fuerte en su pecho y luchaba por encontrar una explicación.

¿Cómo lo sabe? ¿Se lo dijo Mona? ¿O me está probando?

Elena dio un paso más cerca, su tono más firme esta vez.

—Kimberly, no me mientas. Sabes que siempre he tratado de protegerte. No puedo ayudarte si me ocultas secretos.

Kimberly tragó fuerte, las lágrimas amenazaban con derramarse de nuevo, pero se obligó a mantener la calma.

El aire en la habitación se tensó, y pudo sentir la frustración de Elena aumentando.

—Kimberly —dijo Elena suavemente, aunque su voz aún tenía peso—, necesito saberlo todo. ¿Qué te dijo Mona y a qué accediste?