Dentro de la Sala de Estudio

(Narración del Autor)

Tan pronto como la puerta del ascensor se cerró, Myra se reclinó hacia atrás cuando el dolor en su área espinal se elevó repentinamente. Miró la figura encorvada de Nora y frunció los labios.

Honestamente, se sentía un poco culpable por cómo estaba tratando a su amiga de la infancia. Porque según Myra, aunque podría no ser real para la otra parte, para ella, los momentos que había vivido con Nora eran bendiciones enviadas por el cielo mismo.