El apartamento abandonado ofrecía poco consuelo, pero sí una privacidad crucial mientras Kaelen se preparaba para la misión que Oráculo le había encomendado. La Zona Roja del Sector Delta. Solo el nombre evocaba imágenes de horror y decadencia extrema, incluso para los estándares de Neo-Veridia Inferior. Era un viaje hacia un infierno tóxico y disputado, pero era el precio que tenía que pagar por una oportunidad de encontrar a Lena.
Sentado en el suelo polvoriento, revisó metódicamente su escaso equipo. El vibro-cuchillo estaba cargado y asegurado a su muslo. La multi-herramienta, esencial para sortear obstáculos o manipular tecnología simple, estaba en un bolsillo de fácil acceso. El filtro de agua era funcional, aunque el cartucho probablemente no duraría mucho más. Le quedaba una única ración nutritiva estándar; tendría que hacerla durar hasta que completara la misión y obtuviera los créditos prometidos por Oráculo. La batería de energía usada que encontró en los túneles podría darle unos minutos extra a su linterna o, más importante, al Modificador de Señal Simple si necesitaba usarlo.
Examinó el Modificador de Señal que había construido. Era un dispositivo tosco, una maraña de cables y componentes soldados a una placa de prototipo, pero el diagnóstico del Sistema había confirmado su funcionalidad básica. Su alcance era corto (5-10 metros) y la potencia baja, pero quizás suficiente para crear una breve ventana de interferencia contra sensores básicos o para enmascarar su propia firma electrónica de bajo nivel si se acercaba a algún sistema de vigilancia automatizado en la Zona Roja. Era una herramienta defensiva, no ofensiva, pero cualquier ventaja era bienvenida.
Su principal activo seguían siendo sus habilidades innatas y las mejoradas por el Sistema: su Percepción P7, que le permitiría navegar por el peligroso entorno y detectar amenazas antes de que fuera demasiado tarde, y su Resistencia R9, que le ayudaría a soportar las duras condiciones ambientales de la Zona Roja y cualquier daño físico menor que pudiera sufrir. Pero sin habilidades ofensivas significativas o de sigilo mejoradas, y con solo 10 PS como colchón, estaba operando con un margen de error peligrosamente estrecho.
Repasó mentalmente la información que Oráculo le había transferido sobre la misión. El objetivo era un servidor de datos específico ubicado en los restos de un antiguo centro de investigación corporativo dentro de la Zona Roja. El centro había sido abandonado décadas atrás tras un "incidente de contención" (un eufemismo que podría significar cualquier cosa, desde un derrame químico masivo hasta un brote biológico o un experimento tecnológico fallido). El servidor supuestamente contenía registros fragmentados sobre rutas de transporte y logística de la corporación original, información que Oráculo creía poder explotar.
Los datos de Oráculo también incluían advertencias sobre los peligros de la Zona Roja: altos niveles de toxicidad ambiental (química y posiblemente radiológica), terreno inestable, fauna mutada agresiva (los llamados "Ghouls de la Zona Roja" eran una leyenda urbana persistente pero temida), y la presencia de varias facciones carroñeras extremadamente violentas y territoriales que luchaban por los escasos recursos tecnológicos que aún podían encontrarse en las ruinas. El sigilo y la evasión eran clave; el combate abierto era una sentencia de muerte casi segura.
El mapa proporcionado por Oráculo mostraba una ruta de aproximación sugerida al centro de investigación, utilizando principalmente la red de alcantarillado derrumbada y los túneles de servicio subterráneos del Sector Delta para evitar la exposición en la superficie tanto como fuera posible. Era una ruta larga y peligrosa por sí misma, incluso antes de llegar a la Zona Roja propiamente dicha.
Kaelen sabía que necesitaba prepararse mejor. Diez PS no le comprarían mucho, pero quizás podría optimizar su uso. Consultó la Tienda del Sistema de nuevo.
[TIENDA DEL SISTEMA]
[Saldo: 10 PS]
[HABILIDADES (Nivel D/C)]
[- Percepción (D1 -> D2): 8 PS]
[- Resistencia (D1 -> D2): 8 PS]
[- Combate Cuerpo a Cuerpo (Básico - D1): 10 PS]
[- Primeros Auxilios (Básico - D1): 10 PS]
[CONSUMIBLES]
[- Estimulante Básico (Resistencia Temporal +1): 8 PS]
[- Medigel Básico (Curación Leve): 15 PS (Insuficiente)]
La opción de mejorar Percepción o Resistencia base a D2 por 8 PS era tentadora. Un punto extra en Percepción podría marcar la diferencia al detectar una trampa o una emboscada. Un punto extra en Resistencia podría ayudarle a soportar mejor la toxicidad ambiental.
Consideró sus puntos fuertes. Su Resistencia ya era alta (R9). Aunque un punto más siempre ayudaba, quizás no era la mejora más eficiente. Su Percepción (P7) también era buena, pero en un entorno tan peligroso como la Zona Roja, cualquier mejora en la detección temprana era vital. Decidió invertir en Percepción.
[Comprar Mejora: Percepción (D1 -> D2)? Coste: 8 PS. S/N]
Confirmó. [PS: 10 -> 2]
Sintió un sutil ajuste en su procesamiento sensorial, una ligera agudización de sus sentidos, como si el ruido de fondo del mundo se hubiera atenuado un poco, permitiéndole enfocarse mejor en los detalles específicos. Su nivel de Percepción seguía siendo P7 según la designación general del Sistema (que probablemente representaba una combinación de niveles base y mejoras), pero ahora tenía una base D2 subyacente, lo que debería traducirse en una mayor agudeza y fiabilidad, especialmente en condiciones difíciles.
Le quedaban 2 PS. Insuficiente para cualquier otra cosa significativa. Era todo lo que tenía.
Se puso en pie. Era hora de moverse. Calculó que le llevaría varias horas de viaje peligroso solo llegar a los límites de la Zona Roja del Sector Delta. Cuanto antes empezara, mejor.
Guardó el Modificador de Señal y la batería de repuesto de forma segura. Se aseguró de que su filtro de agua estuviera accesible. Se ajustó la capucha y revisó por última vez el apartamento abandonado, asegurándose de no dejar ningún rastro obvio de su presencia.
Salió al pasillo y luego a las caóticas calles del Sector Gamma, moviéndose con una nueva determinación. La misión de Oráculo era un desvío peligroso, una inmersión en el corazón de la decadencia de Neo-Veridia. Pero era un medio para un fin. Era el precio de la información que podría llevarlo a Lena. Y estaba dispuesto a pagarlo.
Se dirigió hacia el sur, hacia los límites del Sector Gamma y el comienzo del Sector Delta, siguiendo las indicaciones del mapa de Oráculo hacia la entrada de la red de alcantarillado que sería su camino hacia la Zona Roja. La ciudad cibernética se extendía a su alrededor, indiferente a su peligrosa búsqueda, un monstruo de neón y sombras que devoraba a los débiles y recompensaba (a veces) a los audaces o a los desesperados. Kaelen era, en ese momento, ambas cosas.