Capítulo 9

Zhou Qiang hizo una gran apuesta.

Tan grande que ni siquiera toda la familia junta podría pagarla.

Cuando los cobradores de deudas llamaron a Zhou Chongwen, él todavía estaba confundido.

—¿Eres el hijo de Zhou Qiang?

La persona frente a él tenía un rostro amenazante, claramente no era alguien con quien se pudiera jugar.

Zhou Chongwen instintivamente negó con la cabeza.

—Se han equivocado de persona, no lo conozco.

—Deja de hacerte el tonto, Zhou Qiang nos debe quinientos mil, y ahora ha huido de la ciudad. Las deudas del padre las paga el hijo, has ido a la escuela, sabes lo que eso significa, ¿verdad?

La otra parte evidentemente no era un simple matón callejero.

Antes de venir, ya habían investigado a Zhou Qiang a fondo.

Zhou Chongwen, en sus dos vidas, nunca había tratado con la mafia y sintió que el desastre era inminente.

—Yo... no tengo dinero...

Su voz temblaba, y el sudor frío no dejaba de brotar, empapando pronto su cabello.

—¿No tienes dinero?