Lucavion se reclinó en su silla, suavizando su sonrisa burlona mientras estudiaba a Valeria. Sus ojos brillaban con curiosidad, su diversión dando paso a una expresión más pensativa.
—Entonces —comenzó, con un tono casual pero indagador—, has estado ocupada antes de venir aquí, ¿no? Me imagino que tuviste una pequeña charla con el Marqués.
Valeria parpadeó, su momentánea vergüenza desvaneciéndose mientras su expresión cambiaba a algo más compuesto.
—Sí —admitió, enderezando su postura—. Me reuní con el Marqués Ventor. Fue... una conversación interesante.
Lucavion inclinó la cabeza, su sonrisa volviendo levemente.
—¿Oh? Cuéntame. ¿Qué tipo de 'interesante' estamos hablando? ¿Te colmó de elogios, o fue algo más... complicado?
Valeria exhaló, su irritación anterior desvaneciéndose al darse cuenta de que podía hablar libremente aquí.
—Ambas cosas, en realidad —dijo, su voz ganando energía—. El Marqués me ofreció una alianza.
Lucavion alzó una ceja, visiblemente intrigado.