Capítulo 89

Traicionado por la Sangre

Avery estaba sentada en su cama, con las rodillas pegadas al pecho mientras las lágrimas silenciosas se deslizaban por sus mejillas. No podía dejar de reproducir las duras palabras de Cain, la ira en su voz cuando todo lo que ella había hecho era ayudar. Honestamente deseaba haberse quedado en la habitación y no haber ido a ninguna parte. Hoy era su descanso de los incesantes problemas que había tenido desde que llegó a su manada, y ni siquiera hoy podía tener un respiro.

Se limpió las lágrimas bruscamente. Su pecho se apretó cuando sus palabras resonaron en su cabeza nuevamente. ¿Era eso realmente lo que él pensaba de ella? Todas esas palabras que dijo, la rabia en sus ojos. Se estremeció internamente, frotándose suavemente la muñeca. La miró de nuevo; estaba roja de ira por lo fuerte que la había sujetado. ¿Qué hizo que fuera tan malo? ¿Por qué estaba tan molesto por algo que dijo un guerrero cualquiera? No era como si él la quisiera, entonces ¿por qué?