Anhelando una pareja

Por la noche, como se había decidido, Gabriel llegó al Hotel Obsidiana de la Luna para la reunión con Rubén, que estaba relacionada con la tecnología médica avanzada para lobos.

Después de que terminó, él y Amelie fueron los primeros en irse. Pero en lugar de ir a casa, Gabriel decidió llevar a Amelie a otro lugar.

—¿Por qué enviaste al conductor a casa? —preguntó Amelie mientras ahora eran los únicos en el auto.

—Porque no quiero que una tercera persona se quede entre nosotros. Vamos adelante —opinó Gabriel y salió del auto por su lado.

Amelie sacudió la cabeza y salió antes de acomodarse en el asiento del pasajero.

Gabriel se aseguró de que ella se hubiera puesto el cinturón de seguridad y la sacó de las instalaciones del hotel. —Estoy bastante impresionado con tu trabajo. Creo que tomé la decisión correcta al mantenerte como mi secretaria. Ni siquiera Karmen era tan buena en el trabajo —dijo. No deseaba mantener el silencio durante este viaje.