Reflejo Destrozado

Desde que salieron a la luz las revelaciones, siento como si los cimientos mismos de mi mundo se hubieran trastornado.

Paso la mayor parte de mis días en una niebla de incredulidad, cuestionando cada recuerdo y cada palabra que Marion me dijo.

El peso de la traición es aplastante, y me encuentro lidiando con emociones que nunca supe que podía sentir: ira, tristeza, confusión y un profundo sentimiento de pérdida.

Esta mañana, desperté con los restos de las lágrimas de anoche aún manchando mi almohada.

La suave luz que se filtraba a través de las cortinas hizo poco para levantar la oscuridad que se había instalado sobre mis pensamientos. Me senté al borde de mi cama, abrazando mis rodillas con fuerza mientras intentaba dar sentido a la nueva información.

El secreto de Marion sobre Aria, su aventura de una noche con Belinda y la revelación de que Aria era su hija, se sentía como una piedra dentada incrustada en mi pecho.