La cámara de cultivo sellada era pequeña, pero la energía contenida en su interior comenzaba a doblar el espacio. Las paredes, hechas de jade vivo y metal espiritual, crujían suavemente, como si supieran lo que estaba por ocurrir.
Jin Muheon se sentó en el centro del círculo de runas.
Sus piernas cruzadas. Su espalda recta.Su mirada firme… pero tranquila.
Qian Rou, de pie junto a la puerta, no despegaba los ojos de él.Sus manos estaban en el pomo de su espada, listas para moverse si algo salía mal.
—Estás forzando los límites —susurró, más para sí que para él—. Pero si alguien puede romper la estructura… eres tú.
Jin exhaló una última vez.
Y entonces, todo comenzó.
El núcleo del Dantian colapsó primero.
Pero no en falla.En redirección.
Las energías internas de Jin, entrenadas para circular como corrientes exactas, comenzaron a girar en sentidos opuestos. El sistema respondió.
"FORZADO: AVANCE A NIVEL SUPERIOR DE CULTIVO — ETAPA: RECONSTRUCCIÓN TOTAL.""RIESGO: EXTREMO."
Primero vinieron los temblores.Luego, las rupturas.
Los músculos de Jin se contrajeron.Sus huesos crujieron como ramas secas.Sus venas espirituales comenzaron a expandirse y despedazarse.
Sangre brotó de su boca, ojos, nariz.Qian Rou dio un paso al frente.
—¡Jin!
Pero él alzó una mano ensangrentada.
—Aún… no.
Entonces vino la llama interna.
Como si su propia clase hubiese cobrado conciencia, una matriz de energía se activó en lo profundo de su alma.El Forjador… ya no forjaba cosas.
Ahora se forjaba a sí mismo.
Como una pieza rota en la mesa de un artesano, su cuerpo comenzó a rearmarse.
Huesos reconstruidos con filamentos de Qi puro.Músculos soldados con energía vibrante.Meridianos reescritos con líneas de formación antigua.
Y entonces, surgieron los nuevos núcleos.
Uno en el pecho, pulsando como un generador de balance.Uno en el corazón, latiendo con resonancia espiritual.Y uno en la cabeza, una corona invisible de pensamiento estructurado.
Cada uno se conectó al otro con finas líneas de luz que circulaban como un circuito viviente.
"NUEVO ESTADO ACTIVADO: SISTEMA DE TRES NÚCLEOS — ESTRUCTURA DE CICLO INTERNO INDEPENDIENTE."
Pero el proceso no fue limpio.
El dolor… era inimaginable.
Su piel se desgarró.Su voz, inexistente.Solo un cuerpo en proceso de autodestrucción voluntaria…con la fe ciega de renacer.
Entonces llegó la explosión.
Un pilar de luz blanca estalló desde la cámara y rompió el cielo.La montaña entera tembló.Las nubes se partieron.Y las barreras de contención… se disolvieron como ceniza.
Los maestros corrieron.
Los ancianos alzaron la vista.
Los discípulos observaron en shock.
Una sola energía… destruyó el sector entero.
Y cuando el polvo cayó…Jin Muheon salió, caminando.
Ya no tenía el cuerpo de un niño de cuatro años.Ahora parecía de ocho.
Sus ojos brillaban con tres anillos concéntricos.Su piel, limpia.Su cabello, más oscuro.Su energía… inhumana.
Qian Rou cayó de rodillas, aliviada y temblorosa.
Se acercó a él, aún con la espada lista, pero con lágrimas silenciosas.
—Estás… estás sangrando.
—No es sangre —susurró Jin, apenas audible—.Es el metal que sobró.El barro que no fui.
Qian le sostuvo el rostro, viéndolo a los ojos.
—¿Por qué? ¿Por qué hiciste esto solo?
Jin miró al cielo.
—Porque construir… no basta.Porque si quiero cambiar el mundo… debo sobrevivir a él primero.
Y en sus ojos, ya no había miedo.Ni siquiera duda.
Solo un resplandor suave…el de un dios en construcción.