El cuerpo de Leo se tensó cuando la pantalla parpadeó nuevamente, una única línea ominosa destellando a través de la pantalla.
[Advertencia: Anomalía no identificada detectada.]
Su pulso se aceleró. Su respiración se ralentizó.
¿Una anomalía?
Su mente recorrió las posibilidades, pero antes de que pudiera procesar lo que significaba, la máquina aumentó con renovada intensidad. Los circuitos pulsaban erráticamente, recalibrándose como si luchara por clasificar lo que acababa de descubrir.
Entonces —lo sintió.
Un tirón, profundo dentro de su núcleo. Algo oculto, algo enterrado muy por debajo de la superficie de su conciencia, siendo agitado forzosamente por la prueba. Sus venas ardían levemente, sus músculos se tensaron involuntariamente, y por un momento fugaz, sintió como si la máquina estuviera extrayendo algo de él sobre lo que no tenía control.